Cómo hacer un casco romano de metal

La historia romana es muy interesante, y el aspecto estético no se queda atrás.

Los romanos vestían de una forma algo peculiar, pero lo que más me llama la atención son los espectaculares cascos de los soldados.

Si eres fanático de la mitología romana o quieres preparar un disfraz legendario, entonces querrás tener tu propio casco.

En este post te enseñaré a hacer un casco romano. Adelante!

Materiales necesarios

Reúne todos los materiales necesarios antes de preparar tu casco. La mayoría de ellos los puedes encontrar en casa:

  • 1 Globo.
  • Pasta para arreglar grietas y muros.
  • Harina y agua. Puedes reemplazar la harina con pegamento común.
  • Hojas de periódico.
  • Cartón.
  • Una lámina de aluminio (o papel de aluminio y cartón).
  • Tijeras para metal y tijeras comunes.
  • Pintura metálica del color que gustes (yo recomiendo dorado o gris).
  • Una lija.
  • Plumas (mientras más puedas adquirir, mejor, le añaden realismo al casco)

Cómo montar el casco romano paso a paso

Prepara la base del casco

Para comenzar, debes inflar el globo hasta que quede del tamaño de una cabeza humana. Átalo con fuerza.

Corta el periódico en tiras con las medidas que creas necesarias, ya que cada modelo es distinto.

Mientras realizas los pasos anteriores, pon a hervir la harina y el agua, ya que el periódico se sumergirá en la mezcla.

Una vez hecho, utiliza las tiras de periódico cortadas para cubrir el globo según las medidas que hayas tomado.

Déjalo secar en un lugar seguro durante al menos 24 horas.

Cuando la tiras de periódico se hayan secado, pincha el globo con algún alfiler.

El resultado será un casco de papel maché, el cual debes cubrir en la pasta reparadora, después, deberás esperar a que la pasta seque.

Cuando la pasta ya esté seca, utiliza la lija para eliminar las imperfecciones. Si es necesario, aplica otra capa de pasta resanadora para cubrirlas.

Preparar las piezas metálicas

Una vez que hayas finalizado la base, será hora de preparar los patrones para dar forma a las distintas piezas que compondrán el casco.

Te recomiendo que primero lo prepares en cartón, así evades desperdiciar el aluminio.

Una vez escojas el modelo que quieres construir, sabrás cuáles son los patrones que debes sacar.

No hay medidas específicas. Utiliza las que te parezcan convenientes para ti o para quien vaya a utilizar el casco.

Cuando tengas los patrones recortados en cartón, procede a utilizarlos para recortar las formas en aluminio (o puedes forrar el cartón de papel de aluminio)

Cuando estén hechas, será la hora de construir el casco.

Montaje final

Procede a colocar  las piezas en el casco de pasta resanadora según el modelo, asegurándote de que queden bien ajustadas para que no se caigan con movimientos bruscos.

Una vez que tu casco esté listo, será hora de pintarlo. Las pinturas metálicas le añaden más realismo, además, aseguran un diseño limpio y llamativo.

Por último, un casco romano no está terminado sin la parte superior, que es donde van las plumas. Una vez las hayas pegado, entonces podrás utilizar tu casco romano sin problemas.

¡Hasta la próxima!

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